*A pesar de argumentar ilegalidad en el proceso y la falta de orden en el recinto oficial, el alcalde sometió a votación la propuesta que incluso no registró los votos en contra
*Aunado a ello, trascendió que el día viernes, asistentes del Comité Compras se negaron a recibir propuestas de proveedores interesados en participar en esta Licitación Nacional
Redacción/San Luis de la Paz. – Bajo gritos de rechazo y otros tantos de apoyos, ediles del Ayuntamiento aprobaron por mayoría de votos las bases para la Licitación Pública Nacional para la adquisición de luminarias.
Aunque durante el desarrollo del tema, algunos ediles exhibieron irregularidades en el proceso previo a su aprobación y así mismo se dio oportunidad a que algunos de los presentes expresaran sus opiniones respecto el tema, el orden se perdió por completo en el sitio y el alcalde Luis Gerardo Sánchez Sánchez, decidió someter a votación aun y cuando las circunstancias impedían incluso escucharse el cuestionamiento y acuerdo por parte del secretario.
Lo anterior, tuvo lugar la tarde del pasado miércoles 14 de junio, durante la sesión extraordinaria convocada con el propósito primordial de aprobar las bases para la licitación de las nuevas luminarias, mismas que un día antes, en Comité de Compras habían sido aprobadas a pesar de ciertas anomalías denunciadas por los regidores pertenecientes al Comité y avaladas incluso por el mismo contralor, Iván Valadez, quien estuvo presente durante la reunión de dicho comité.
En dicha reunión, se evidenció la falta de convocatoria formal y entrega total de la información que sería analizada y aprobada durante la reunión, a una de las integrantes del comité, algo que, de inicio, significaría incluso la invalidación de dicha comisión, según vertió el propio Contralor.
Haciendo caso omiso a ello, el resto de integrantes decidió aprobar el punto y turnarlo al pleno para su aprobación formal por parte del Ayuntamiento.
Ya en la sesión del miércoles, ante decenas de ciudadanos presentes en el recinto, algunos mostrando apoyo al proyecto y otros tantos en contra, el tema comenzó a desarrollarse tras una exposición hecha por el propio alcalde Gerardo Sánchez, quien posteriormente puso a debate el mismo, recibiendo por parte de algunos ediles argumentos suficientes para reconsiderar el tema, sobretodo haciendo hincapié en el tema del costo que el mismo podría tener y la modalidad en que el Municipio buscaría financiar dicho proyecto que hoy se habla, podría superar los 74 millones de pesos y que consideran solventar en un periodo de hasta 5 años.
Concluidas las participaciones de los ediles, se dio paso a la participación de los ciudadanos presentes, situación que prendió los ánimos en el lugar y provocó el disturbio en el lugar, comenzando los gritos y el confrontamiento entre los presentes, incluso algunos arremetiendo contra el propio alcalde.
Ya volviéndose todo un show el lugar y ante la imposibilidad de mantener el orden, el alcalde entre gritos buscó poner fin a la situación poniendo a consideración del pleno la aprobación de las bases previamente expuestas y solicitando al secretario de Ayuntamiento, Jairo Álvarez Vaca, registrar el número de votos obtenidos, siendo estos 8 a favor de los regidores: Jaime Mata Pérez, Juan Antonio Torres, Aidaveth García, Lorena Zarazúa Ríos, Ángel Padrón, Jacinto Salinas y Karina Sánchez, así como el del alcalde, Luis Gerardo Sánchez.
Mientras que, ante el desorden presente, la solicitud de los votos en contra fue imposible de realizar, por lo que sin poder emitir sus votos en contra o argumentar el mismo, el resto de ediles no fueron considerados, pues el alcalde enseguida anunció la clausura de sesión ante la molestia de ediles y ciudadanos presentes.
No siendo suficiente lo acontecido previamente, el día viernes 16 de junio, fecha pactada para recibir las propuestas de proveedores interesados en participar en la Licitación Nacional, sobresalió que, aparentemente de manera deliberada, la asistente del Comité de Compras se ausentó de su área de trabajo por largas horas, esto, con el propósito de negarse a recibir nuevas propuestas de proveedores, algo que, según se supo, fue denunciado ante Contraloría por los propios afectados.