Uno de los focos rojos de atención en las familias de este municipio, ante el resguardo domiciliario que se ha tenido desde aproximadamente siete meses, y que se ha incrementado en últimos días debido al rebrote en los casos confirmados por Covid-19, es principalmente el estrés que presentan los padres de familia, el cual es transmitido a los menores.
Lo anterior fue informado por Paola Estévez Moran, Psicóloga responsable del área de desarrollo de competencias, y habilidades parentales del Sistema Integral para la Familia DIF, añadiendo que lo anterior es lo que se ha podido detectar en los grupos de padres de familia.
“Aunque no tenemos grupos presenciales, puesto que estamos trabajando a distancia, lo que hemos detectado es el estrés por parte de los padres y que este lo están llevando a sus hijos”
resaltó.
Añadiendo que, esto se deriva porque los menores aprenden por medio de movimientos, por lo que siempre se encuentran ‘brincando o moviéndose de un lado a otro’, y el hecho de estar encerrados gran parte del día, es lo que les está afectando.
Acrecentando que también se encuentra la parte en la atención de los trabajos que se ven y se dejan en las escuelas vía virtual, que también están ligados con el estrés que presenta papá o mamá.
Por lo cual, -resaltó- que derivado de lo anterior es cómo surge la idea de poder ayudar a este sector, mediante actividades o estrategias que el área de prevención está llevando a cabo de manera individualizada acorde a la situación que se esté presentando.
Para finalizar, exteriorizó que, para la debida atención, la gente debe quitarse el ´tabú´ de que el psicólogo es solo para gente enferma o ´loca´, y que la información que llegue al área de psicología ahí se queda, debiéndose generar la confianza para la atención.