Las pésimas condiciones en las que se encuentra el personal de recolección de basura y que el gobierno del morenista Genaro Martín Zúñiga Soto se ha mantenido omiso, obligaron a los empleados a emprender un paro de labores para exigir las mejoras y desempeñar de una mejor manera sus encomiendas.
A primera hora del día de hoy, personal del área de recolección de basura se hicieron presentes a las afueras de presidencia a bordo de las únicas cuatro unidades con las que cuenta el municipio para esta área.
A dicho grupo se sumó el director de servicios municipales, J. Dolores Olvera quien confirmó todo lo dicho por sus colaboradores de área.
En entrevista, un representante de este sector de trabajadores explicó que, las condiciones en las que se encuentran las unidades son muy precarias, puesto que sólo tienen 3 en funcionamiento y su estado es lamentable.
De la misma manera dijeron que tienen 5 unidades más que se encuentran en el mecánico desde hace varias semanas y dejó entrever que la burocracia municipal no ha agilizado su mantenimiento.
“Les he pedido a las autoridades que me apoyen, pero nada más me han dado largas. Tenemos más de 20 personas incapacitadas y no hacen caso de que las liquiden para que nos autoricen las plazas”
externó molesto el representante.
Dijo que los muchachos de la dirección están cansados porque ante esta situación están trabajando horas extras, pero al momento de cobrar, dice- que les quitan más impuestos.
“Ya están cansados, somos poca gente, no tenemos herramienta”.
Otro empleado fue claro en decir que:
“Les falta toda la herramienta para poder trabajar (…), lo que más queremos es nuestro equipo y herramienta de trabajo para poder trabajar. Nos prometieron aumentarnos el sueldo y no, no lo han dado”.
Del mismo modo externaron que otra de sus inconformidades radica en que el municipio, ya no les permite el quedarse con materiales reciclables que van recolectando de la basura que recogen por todas las colonias y con esto se ayudaban en sacar un dinero extra.
Por lo que señalaron que esto se venía dando desde hace más de treinta años y no es justo que ahora de buenas a primeras ya no lo permitan.
Hasta el momento, ni el alcalde, Genaro Zuñiga Soto, ni algún otro funcionario de primero y segundo nivel habría recibido a los trabajadores inconformes.
