Más de 20 toneladas de basura están acumuladas en un predio particular localizado a un costado de la carretera Doctor Mora-Morisquillas generando contaminación, crianza de fauna nociva y un olor putrefacto lo que afecta a poco más de 50 familias del lugar.
Más de diez habitantes denunciaron ante este medio de comunicación la terrible situación que padecen dos o tres años atrás.
Indicaron que, la problemática inició cuando el presunto dueño de nombre J. Guadalupe Reséndiz Lugo colocó un aviso en el que se solicitaba escombro para rellenar el gran orificio, no obstante, la población comenzó a tirar sus desechos sin restricción alguna.
En el lugar se aprecian animales muertos como perros, borregos, huesos de ganado vacuno y desperdicios, que son depositados por gente que se dedican a la venta de carne en la Plazuela Unión Bicentenario, según explicaron los propios vecinos.
“Los carniceros vienen y tiran sus desechos ahí”.
José Manuel Estrada Castañeda, habitante de ese lugar, denunció que, hasta el momento la autoridad municipal continúa sin intervenir a pesar de tener de conocimiento la problemática, señalando que a través de Servicios Municipales también depositan desechos que resultan de la poda de árboles.
El ciudadano expresó que, cuando andaban en campaña el partido que hoy gobierna, los habitantes pidieron al ahora alcalde que, si llegara a quedar, que clausurara el lugar y su respuesta de momento fue llevar a cabo la clausura de manera inmediata.
Manifestó la crianza de ratas, mal olor, e infecciones estomacales que padecen principalmente adultos mayores y niños.
Otra habitante, de nombre Mayra Pichardo, comunicó que, ha sido recurrente que la propia población arroje sus bolsas repletas de basura de manera prepotente, pues ellos les han pedido que dejen de tirarla en el sitio “y todavía se burlan”, enfatizó.
Dijo que, estaba en el entendido que el terreno lo convertirían en áreas verdes, ya que a unos metros se encuentra su Centro Comunitario, pero cuando se comenzó con la construcción del camino, apareció el dueño circulándolo.
Agregó que, en la temporada de calor el olor es insoportable y la basura es regada por el aire en un radio de más de un kilómetro.
Otra situación que puntualizaron, es que los perros ya han mordido a algunas personas que tratan de alejarlos para que no ingieran los desechos, mencionando que, se han visto poco más de 30 caninos alimentándose de vísceras y huesos arrojados en el sitio.
Además, los pobladores denunciaron que en ocasiones los que hacen uso del lugar, prenden fuego a la basura, ocasionando más contaminación y que el humo se introduce a sus hogares infectando sus alimentos.